¡Pobre Marino!

Por Rosario Castillo

Anoche entraron en la pobre vivienda de Marino Pérez y le llevaron todo lo que tenía de valor. Marino tenia en un bulto cuidadosamente guardado una serie de artículos que le habían regalado y algunos que él había comprado con mucho esfuerzo y lo conservaba para una necesidad, una enfermedad o algo por el estilo, pero anoche lo dejaron sin nada. Hoy anda Marino como alma en pena. Puso la denuncia en la policía pero imagínese usted.

Entre lo que le robaron, Marino nos dice están:

- 15 sábanas (estas se las habían regalado cuando quitaron (o trasladaron) el hotel Tubano,
- 5 cubre colchónes,
- 6 pares de medias,
- 3 toallas,
- la tarjeta de solidaridad el carné del Seguro,
- de tres pares de zapatos le dejaron un zapato de cada par,
- lo dejaron sin pantaloncillos,
- se le llevaron un radito,
- todos los cubiertos,
- y toda la comida: un saquito de arroz, un galón de aceite, sopita , etc., etc., etc.

Dejaron a Marino en la calle.

Marino tenía lo mejor de su haber conservado para una ocasión, como él mismo dice, y mire cuál ocasión se le presentó. Así es la vida, lo dicho, al pobre solo le vienen cosas malas. Pero yo digo buenas también.

Marino había trabajado como sereno del parque por algún tiempo, pero hace unos años fue cancelado y esta subsistiendo de una paletera surtida de chuchearías que vende en la Escuela Primaria. Bueno veremos que le puede llegar a Marino de bueno con esta denuncia.