Discurso de Melba de Grullon

Palabras De La Señora Melba Segura De Grullón Presidenta De La Fundación Sur Futuro En El Acto De Entrega Del Reconocimiento De Que Fuera Objeto Por Parte Del Ayuntamiento Municipal De Padre Las Casas

Honorable Señor Alcalde de Padre Las Casas, mi distinguido amigo Fernando de los Santos; Señores miembros del Consejo Municipal; Autoridades civiles, eclesiales y militares. Señoras y señores; queridos amigos todos.

Es para mi un gran honor y motivo de mucha satisfacción, el hecho de que el Ayuntamiento de Padre Las Casas y su Consejo Municipal me honren distinguiendo el
trabajo que, a lo largo de diez años, ha venido desarrollando la Fundación Sur Futuro, en beneficio de los sectores sociales, en beneficio de los sectores sociales, familias y personas mas necesitados de la Región Sur y de otras zonas geográficas del país.

A decir verdad, considero que los reconocidos hoy, delante de todos ustedes queridos compueblanos, han de ser los hombres y mujeres que han laborado a lo largo de una década, de manera abnegada e infatigablemente, para convertir a la Fundación Sur Futuro en una autentica opción de esperanza presente y futura, en una fuente viabilizadora del desarrollo humano y del progreso comunitario, capaz de transformar las condiciones de vida de miles y miles de dominicanos. No por casualidad el lema institucional bajo el cual esta fundación social y humanitaria lleva a cabo reza:”Abriendo surcos de esperanza”.

Como muchos de ustedes recordaran, especialmente el honorable Señor Alcalde, y aun aquellos que han tenido que emigrar en busca de progreso personal y bienestar para sus familias, pero que hoy se encuentran entre nosotros, nací y me crié en el seno de una familia de fervientes luchadores por las libertades democráticas, los derechos
ciudadanos y la institucionalidad jurídicopolítica de este país. Soy modesta portadora de un gen de luchas libertarias que, a través de La Fundación Sur Futuro, y con la colaboración de familiares, personas, instituciones nacionales e internacionales y empresas comprometidas con las mejores causas del país, hemos logrado convertir en proyectos educativos, de salud, de protección medioambiental, de capacitación comunitaria, de microfinanciamiento y de producción agrícola, entre otros, cuyo impacto ha contribuido a combatir el flagelo de la pobreza, la desatención social, la ignorancia y las grandes desigualdades en nuestra nación.

Pero, nada de ello fuera posible sin el amor, sin la fe y determinación ante la esperanza que caracterizan al pueblo dominicano para vencer las adversidades, y que cada uno de los integrantes de nuestra institución recibe, agradecido, en manifestaciones de afecto de tantas personas y familias pobres del sur profundo y de otras comunidades, que han sido beneficiadas por nuestros programas.

Mi mayor gratitud al Ayuntamiento de Padre Las Casas por este noble gesto. Y a todos
ustedes, mis entrañables conciudadanos, mi profundo deseo de contagiarlos con las
bíblicas palabras que definen la fe como” certeza de lo se espera y convicción de lo que no se ve”, porque es allí donde florece el sentido terrenal de la esperanza.

Muchas gracias.